Nadie duda de que emprender está de moda. El no tener jefe, no
tener un horario, dedicarte a lo que te gusta y contar con un propósito
inspirador es el ideal de muchas personas. Diversas iniciativas para el desarrollo de proyecto emprendedores
surgen en todo el mundo y México no es la excepción, cada fin de semana existen
eventos en diferentes ciudades todas con la misma extensión: impulsar la
actividad emprendedora.
Razones para impulsar el emprendimiento hay muchas: impulsar la
actividad económica, buscar alternativas para la movilidad social, empoderar a
la juventud, encausar la pasión de muchos jóvenes por cambiar el mundo ha sido
una gran labor, sin embargo también hay mucho bla-bla, mucho mentores al vapor,
muchos hablando del tema con poca profundidad, muchos tratando de copiar lo que
escucharon en un viajecito a Silicon Valley.
No es mi intención hacer una crítica destructiva de las buenas
intenciones de mucha gente, sin embargo también es cierto que existe mucha
palabrería, incubadoras que no incuban a nadie, aceleradoras que no aceleran, gente enseñando emprendimiento en las
universidades que nunca ha tomado un riesgo, que nunca han arrancado un
negocio, organizaciones fantasma que son expertas en “bajar” recursos públicos
y que viven de ello que aportan poco valor a emprendedores y empresas y que más
bien son expertos tramitadores de cédulas y comprobadores de registros.
Como bien dice mi amigo Nacho García en nuestro ecosistema
emprendedor de la CDMX hay mucho “talkers” y no tantos “doers” como se
quisiera. También personajes reconocidos como Jorge Zavala siempre pregunta en
la redes cuando alguien habla de un proyecto emprendedor ¿Qué proyectos
surgieron? ¿qué avances concretaron?, preguntas muy oportunas porque el emprendimiento
es acción, no pláticas.
Supongo que es parte de la consolidación de nuestro ecosistema,
algunas startups comenzaran a despegar, se irán cribando paulatinamente
aquellas iniciativas que verdaderamente generan valor, se mantendrá aquello que
tenga consistencia, que aporte verdaderamente algo valioso a la actividad
emprendedora y en última instancia al desarrollo económico del país.
Para mi, personajes como Nacho y Jorge, en su madurez y con un
prestigio bien ganado, siempre están buscando aprender, ir a más, aportar valor
con cada persona con la que interactúan; son un gran ejemplo para todos los que
estamos en el medio. Debemos estudiar y prepararnos siempre para aportar valor desde nuestras propias trincheras.
Tratemos de ponerle autenticidad, cada quien en su sitio, cada
quien poniendo lo mejor de si mismo, trabajando, no buscando los caminos
fáciles, no copiando textual lo que se da en otras latitudes, tratar de pensar,
de arriesgar de ponerle un poco de audacia, de poner el corazón para lograr
nuestros objetivos.
¿Tú que opinas?
Jorge Peralta
@japeraltag
@innovadisrup
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