Afortunadamente el 2016 fue un año lleno
de trabajo y satisfacciones, no sin dificultades y retos pero con saldo
positivo. Todavía en estos últimos días previo al término del año estuve
trabajando varias horas en una herramienta que presentaba un reto especial
porque es para un cliente de un sector distinto a los que habíamos trabajado
anteriormente
La herramienta no la estaba desarrollando
por gusto sino por absoluta necesidad, los primeros días de enero será
necesario entregarla y trate encontrar algún apoyo conceptual buscando
herramientas de algunos de mis “gurús” sin embargo no encontré nada que me
pudiera ser útil. Caí en la cuenta de que es uno de esos temas que los
“innovadores” resolvemos de forma empírica, a nuestro modo, en donde plasmamos
la experiencia de varios años y varias decenas de proyectos en la espalda. Sin
duda es la necesidad la que nos hace movernos, buscar alternativas, innovando sin pensar en lo que no tenemos sino en el potencial que tenemos para construir lo que nos falta.
En muchos temas tu mismo debes
provocarte, buscar la necesidad porque de otra forma será fácil caer en la zona
de confort, y siempre debes buscar crecer, avanzar de otra forma comenzaras a
vivir de tus rentas y comenzaras el declive. Buscar esos nuevos retos son los
que te permiten superarte.
Así como este ejemplo podría mencionarte
muchos otros en los que se aprende haciendo, se aprende cometiendo errores y no
se aprende con las experiencias de otros, es necesario recorren nuestra propia
ruta. No se trata de inventar el hilo negro ni dejar de apoyarse en el
conocimiento que han generado otros, eso sería suicida, sino de que aún cuando
tomes conocimientos de otros, hasta que no los haces tuyos difícilmente los
puedes aprovechar al máximo.
La innovación como muchas otras
actividades humanas no se aprenden en los libros, se aprenden haciendo. Seguramente
habrá muchos muy buenos talleres, pero en el fondo te darán algunas herramientas
para que tu las pongas en práctica con tus casos reales, resolviendo los
problemas que tienes enfrente, tus problemas. ¿Te imaginarías a una persona que
quiere nadar con un video de youtube sin tener una alberca disponible? Se necesita
aterrizar en la realidad y probar, de otra forma estarás teorizando.
La única forma de aprender a innovar es
INNOVANDO…
Si la única forma de aprender ciertos
conocimientos es haciendo, practicando, equivocándote, fallando y recomenzando,
una y otra vez, hasta volverte maestro…
Pierde miedo a equivocarte, intenta, toma
acción, en tu escritorio y frente a tu pantalla no pasará nada, tienes que
recorrer la ruta. ¿Ya tienes un proyecto retador para comenzar el año? Si no es
así, estas a tiempo todavía, pero esperes a que te llegue, es muy probable que
lo debes buscar. Innovar se esta convirtiendo en una necesidad para las
personas y organizaciones, porque todo cambia, y más rápido de lo que crees.
Sin embargo el reto esta en ¿cómo hacerlo
o en qué temas innovar? Cada industria, cada organización, cada persona tiene
sus retos, esos que están en el límite del temor, de no ir más allá porque “así
lo hacen todos”, o “así lo hacen los grandes” la realidad es que así lo hacen
los que innovan, los que van por delante.
Y ya que sea ha decidido en qué innovar,
ahora habrá que informarse bien de un método, de proponer un proyecto, de armar
una estrategia de buscar el mejor camino para comenzar. Por último perseverar,
porque no siempre sale a la primera y porque no siempre se es exitoso aún
cuando pongas todo tu empeño, se necesita perseverar.
¿Cuántas veces te has lamentado de que no
has comenzado algo que habías planeado?
¿Cuántas veces has hecho propósitos que
haz dejado detenidos sin perseverar?
Piérdele el miedo a la incertidumbre,
abrázala, no te dejes llevar por falsos pesimismos, que si Trump, que si el
dólar, que si Peña, que si la gasolina, pretextos y más pretextos, el verdadero
protagonista de tu historia eres tu mismo, pero te dejas llevar por el miedo
que luego disfrazas de prudencia.
Estamos en un momento difícil pero de
gran oportunidad, los que tienen todo tienen más miedo porque pueden perderlo;
pero los que estamos en etapa de construcción, en una etapa temprana, tenemos
todo por hacer y manejar correctamente la incertidumbre es parte del juego. 2017
no es la excepción, es una gran oportunidad para recomenzar, tenemos todo por
delante, con dificultades y posibilidades como todos los años.
Habrá mucho espacio para la innovación,
para ponerse por delante de otros, para trascender, para ser diferente. ¿Es
riesgoso? Si pero es más riesgoso no cambiar y que en poco tiempo quedemos
obsoletos. Saber entender los signos de los tiempos, mantenerse con el puñal en
los dientes y con el cuerpo alerta, para aprovechar todas las oportunidades que
se te presentaran enfrente será la mejor forma de enfocarse desde el día uno
sin perder el tiempo ni un minuto.
Dedicar tiempo a pensar, que siempre es
necesario y en ocasiones se hace con tan poca frecuencia que con el tiempo se
pierde si no se usa con regularidad; esos minutos que periódicamente dediques a
pensar y a decidir sobre el futuro son oro molido, no los dejes, aunque estés
lleno de cosas, no los dejes.
Te deseo un 2017 espectacular, con éxitos y sin sabores que la madurez te permitirá convertir en escalones para seguir avanzando. Confía en ti mismo, en tu intuición, en que en buena medida el resultado depende de ti, el creador hará su parte pero tu debes hacer la tuya. Importa mucho el esfuerzo que pongas por no bajar la guardia, dejando tiempo siempre para la reflexión y para la decisión.
Recuerda que nada se resolverá desde tu escritorio, que el 2017 comienza mañana sábado, arranca con fuerza desde el primer día con lo que te has propuesto, no te hagas…
Jorge Peralta
@japeraltag
@idearialab